
«Los datos son elocuentes, en todos los años del período de la anterior gestión de gobierno, las ventas de Vicentín superaron el promedio de ventas de las 200 empresas de mayor facturación de la Argentina. En el acumulado de los tres años considerados, mientras el total de las empresas de mayor facturación tuvieron una expansión de ventas del 51,36 por ciento de promedio anual; Vicentín superó ese porcentaje en un 83,87 por ciento de promedio anual», sostiene Claudio Lozano, actual director del Banco Nación Argentina en su «Primer Informe sobre la situación de la firma Vicentín», publicado el 16 de enero de 2020.
«…el pago del impuesto a las ganancias que figura en el balance es de apenas $46,2 millones. La empresa apenas paga el 2,4% de las ganancias que declara!», agrega Lozano sobre Vicentín.
“La compleja trama societaria, la existencia de empresas controladas en el extranjero, la naturaleza rentística que denota el comportamiento de la empresa a través de la información contenida en sus balances, obliga a desplazar el argumento empresario que vincula la crisis de la firma con lo que denominan estress financiero. Por si esto fuera poco, los juicios de la AFIP contra la empresa se asientan en dudas que apuntan a una sobre estimación de costos y a la alteración de la base sobre la que deben calcularse los derechos de exportación. Dicho de otro modo la AFIP supone que la empresa incurrió en el delito de sub-declarar exportaciones. Claramente el “muerto” que la administración Macri/Fraga dejan en el Banco Nación es resultado de una maniobra fraudulenta de la firma en complicidad con la anterior conducción política del país y de la institución financiera», termina diciendo Claudio Lozano.
Vicentín es la síntesis de las grandes empresas argentinas: colaboraron con la dictadura y se beneficiaron con ella, subfacturan ganancias, no pagan impuestos en su provincia por la increíble sumisión de los grandes partidos políticos, imponen la política tributaria al conformar la comisión de seguimiento de la política fiscal de Santa Fe como durante los tiempos del ingeniero Lifschitz y evaden otros gravámenes.
Por algunos de esos delitos, la Cooperativa de Trabajos Portuarios de Puerto General San Martín sufrió el encarcelamiento de su principal dirigente. La diferencia es que Padoán fue el presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario y Juárez, un dirigente sindical. Vicentín debería ser investigada por lavado de dinero, un delito tipificado en 1989 y que solamente tiene, desde hace 31 años, solamente doce causas resueltas en la Argentina, síntesis de la impunidad del gran capital.