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La misma mujer ingresó con anterioridad de modo amenazante y esta vez hubo violencia física. Los traumatólogos no entienden cómo entró si supuestamente había medidas dispuestas para que se le impidiera el ingreso. Una mujer provocó destrozos en el área de traumatología del Hospital Cullen.
La mujer llegó al nosocomio en la noche del viernes 22 de noviembre cerca de las 20.30. Empujó y abrió a patadas la puerta de la sala de traumatología del Hospital José María Cullen. Con un cuchillo entre sus manos provocó destrozos sobre el escritorio y agredió a uno de los médicos. Personal policial del destacamento 11 intervino, la detuvo y la derivó a la seccional cuarta de policía donde quedó aprehendida.
Destrozos en el área de Traumatología del Hospital Cullen.
Los doctores Nicolás Perret ( mat. 8126) y Nicolás Zanuttini (mat. 8035) quienes prestaban servicio en ese momento dialogaron con Bruno Ballesteros desde el móvil de Aire de Santa Fe y relataron lo que no quieren volver a vivir.
«Esta mujer viene desde hace dos a tres meses increpando, insultando a quién se le cruce dentro de esta sala. Anoche estábamos atendiendo un paciente con una fractura, sentimos un golpe fuerte en la puerta y esta mujer ingresó. Entró a golpes de puño y patadas, la enfermera se defendió mientras nosotros atendíamos y teníamos las manos ocupadas, no nos podíamos mover. Tiró todo lo que había sobre el escritorio: computadora, papeles y golpeó a uno de los médicos».
El personal del destacamento fue alertado, llegó la guardia femenina y logró reducirla. «Nosotros nos sentimos desprotegidos a la hora de atender. Aclaro que es la única paciente con la que tenemos problemas. Primero eran insultos y acusaciones y ya terminaron siendo agresiones físicas. Yo nunca había vivido algo así», expresó uno de los doctores.
Los entrevistados se encargaron de aclarar que la mujer no llega con el objetivo de agredir a alguien en particular pero siempre va a traumatología.» No le importa quien sea, ella viene y golpea a quien se le cruza. Las veces que la llevaron detenida a las dos horas estaba en libertad. Nosotros no queremos que esto pase a mayores, la mujer estaba armada, dependemos de la suerte, realmente fue de película», concluyó.
Por último, el médico aclaró que la enfermera se atajó de la agresión con una silla y que existe orden del director del Hospital para que la agresora no ingrese porque ya la conocen. «Esto no tendría que haber pasado».
