
En éste caso señalan al dirigente político, señor Jorge Duvouloy, ex diputado provincial, que jactándose de todos los contactos políticos y empresariales que tuvo y dice tener, entusiasmó a muchas familias de la insipiente localidad de Hardy, que Él les iba a conseguir proyectos productivos para mejorar la economía del hogar de las familias más vulnerables de la localidad.
Esos proyectos productivos que vendrían del ministerio de desarrollo social de la nación y/o del ministerio de producción, constaba de doce “OVEJAS” por familia; a cada una de las familias que les habían prometido en las distintas reuniones llevadas a cabo en plena campaña electoral, donde además participaba un veterinario que era invitado por el dirigente, él les tomó todos los datos filiatorios, familiares, fotocopia de documento nacional de identidad de cada uno de los integrantes de cada grupo familiar, las explicaciones llevadas a cabo por el profesional veterinario para la el tratamiento de los ovinos, todo ello entusiasmó a las personas involucradas en el programa prometido, y realmente sentían que por fin, alguien hizo algo por ellos.
Pero lamentablemente la desazón NO tardó en llegar cuando se enteraron que realmente las “OVEJAS” fueron traídas a la localidad, por entonces todavía un barrio de la ciudad de Florencia y en pleno proceso de independización, ya que se estaba llevando a cabo las primeras elecciones generales para elegir al primer presidente comunal de Hardy y Duvouloy, era candidato, pero para desgracias de éste dirigente NO fue favorecido por el VOTO popular; por ese motivo, a todos aquellos que estaban en el programa de las OVEJAS y el o sus punteros políticos pensaban que no le habían votado, directamente NO les entregó la partida de OVINOS, lo que es peor, el se quedó con más de cien OVEJAS.
Denuncia pública comprobable, verificable y tangible, porque los estafados mantienen la documentación completa de todo el proceso de gestiones para la concreción del proyecto, porque el dirigente tiene las ovejas un su chacra y NO puede demostrar la compra de las mismas y porque en un pueblo chico, todo se sabe y son muchos los testigos.