El niño despierta mirando para todos lados, como buscando algo. Lo primero que ve es a su Abuelo, o sus tíos, o hermanos mayores y con un gesto de duda le pregunta ¿Dónde está mi papá? abrazándolo y besándolo, le contesta.
Papá… se fue a trabajar. Al niño le invade un silencio y una inmensa tristeza, vuelve a preguntar. ¿Y por qué papá tiene que irse tantas veces antes de que amanezca, y regresar después de que me duermo???
La persona que le acompaña, con un gesto de amor y de orgullo, le contesta… porque es un MOZO. Mientras lo vestía, el niño vuelve a mostrar su curiosidad y pregunta. ¿Qué es un MOZO ?… Ante la duda le contesta «Es aquel hombre o mujer que no tiene horario de trabajo, es aquel que no tiene navidad, es aquel que no tiene año nuevo, que no celebra cumpleaños ni feriados, que no tiene veranos ni inviernos.
Para él todos los días son iguales, es como la bandera Nacional, se lava con la lluvia y se seca con el sol , UN MOZO .. Es aquel que no te ve cumplir tus añitos. Es aquel que tiene como amiga la oscuridad de la noche, las estrellas, con quien comparte sus problemas y en las noches más frías, comparte sus pensamientos, es aquel que no atiende a su familia porque a veces debe atender a los demás, es aquel que duerme menos que cualquiera a lo largo de su vida y sabe que morirá antes que los demás, cansado y a veces, sin amigos…
Es aquel, quien muestra tu foto y dice orgullosamente éste es mi HIJO…!
Dedicado a todos los MOZOS del mundo y a sus seres queridos, a quienes la vida los llevó a cumplir con éste rol.
Si eres uno de ellos, sentite orgulloso de ser, y a los que no lo son para que entiendan que ser MOZO no es fácil, es la difícil, pero hermosa vida de ser simplemente un “MOZO”.
Dedicado a mis amigos, Miguel Salazar de Córdoba y Juan Carlos Echevarría de Buenos Aires.